Cristina se arriesga con el cambio de estilo más radical hasta el momento. El caso de Ariadna era complicado desde el principio, la historia de una chica que se vino abajo y renunció a sus sueños pasando al lado oscuro, el de la negación y la rebeldía. Algo que empieza en el interior y tiene su proyección en una imagen descuidada y en contra de cualquier estilo.

La estilista más veterana se atrevió con este rompecabezas y decidió cortar por lo sano, ni siquiera las lágrimas de Ariadna al ver su melena roja caer al suelo le hicieron echarse atrás. El resultado impresiona. Una mezcla entre Pink y una «Coco Chanel Poppy» anuncian la nueva vida de Ariadna ante la mirada atónita de su familia y del resto de estilistas.

¡No os perdáis el cambio más rebelde!